Rwanda es un pequeño país centroafricano con una superficie de 26.340 km2 y una población de unos 12 millones de habitantes, lo que supone una densidad demográfica de unas 461 personas/km2. Si comparamos esta cifra con España, resulta que la densidad demográfica es de 46 personas/km2.

Es por ello que, esta superpoblación, la falta de recursos y la escasez de terreno, tienen sumida el país en la más absoluta pobreza. Los Misioneros de los Sagrados Corazones de Jesús y María,  se establecieron en los años 60 en la parroquia de Kiziguro y, posteriormente, en Butare y Nyakayaga, con la intención de ayudar a sus habitantes, promoviendo proyectos de desarrollo, sobre todo, en los campos de formación, salud, vivienda y agricultura. Actualmente,  esta labor la lleva a cabo la Fundación Concordia, junto con el socio local, la Fundación Concordia-Ineza.

Con este proyecto, se trata de favorecer la educación, una vez superada la primaria. La educación es el camino para poder desarrollar sus propias ideas, razonamientos y, en consecuencia, se aprende a pensar. Encontramos chicos y chicas, con capacidades, que no estudian por no tener dinero suficiente para poder acceder a la educación y, eso no les permite salir de la situación en que se encuentran que es la pobreza extrema.